Venezuela ha sido tradicionalmente considerado como un país con una reserva inagotable de recursos energéticos y este hecho ha influido en los hábitos de su población hasta el punto de ser el país de mayor consumo de energía eléctrica residencial por persona en Sudamérica. Adicionalmente el crecimiento de la población y el desarrollo de la tecnología han permitido a sus habitantes exigir más confort, lo cual se traduce en mayor variedad de equipos e instalaciones y, en consecuencia, en una demanda creciente de energía.

La Guía del Consumidor de Energía Eléctrica en Viviendas y Oficinas permite orientar al público no especializado en la toma de decisiones para la adquisición, la remodelación, el uso y el mantenimiento de edificaciones con criterios de eficiencia energética. Puede ser utilizada por propietarios de viviendas o potenciales compradores, juntas de condominios, gerentes o jefes de oficinas y cumple una función de mediano y largo plazo porque haciendo uso de sus recomendaciones los ciudadanos pueden contribuir a proteger el medio ambiente, reducir el nivel de contaminación y preservar los recursos naturales para las generaciones futuras.

El contenido de esta Guía incluye recomendaciones de arquitectura y de instalaciones y equipos, fáciles de aplicar y de amplio impacto para la calidad de vida y la racionalidad energética. Además hace énfasis en la adopción de hábitos de consumo adecuados.

Los beneficios esperados de la aplicación de esta Guía están enfocados en:

• Racionalizar la demanda y la oferta de energía eléctrica.
• Disminuir en la economía familiar y empresarial los costos por electricidad y adquisición de repuestos así como el pago por el mantenimiento asociado.
• Profundizar en el manejo racional de otros servicios tales como gas, teléfono, desechos y mantenimiento general.
• Adquirir hábitos de consumo ambientalistas que se prolongen a través de las generaciones futuras.
• Comprender la incidencia de la energía en el contexto de la economía y de la calidad ambiental de un país así como de la responsabilidad personal que ello implica.
• Mejorar los niveles de confort térmico y lumínico de los ambientes y su incidencia sobre la calidad de vida.

La ejecución de este proyecto ha sido promovido y financiado por el Fondo Nacional de Ciencia y Tecnología (FONACIT) a través del Programa Agenda Ciudad, creado para impulsar la investigación en edificaciones y estructuras urbanas con el fin de mejorar la calidad de vida. Fue ejecutado en el Instituto de Desarrollo Experimental de la Construcción con la participación de la empresa privada a través del apoyo logístico y financiero de la C. A. La Electricidad de Caracas.